El libro de sombras (I): rituales y liturgia Wicca según G. Gardner

02.04.2023

Se llama libro de sombras al grimorio personal de un brujo o una bruja, o al grimorio colectivo utilizado por un aquelarre. Aunque este nombre está muy extendió, el "primer" Libro de Sombras llamado así es la recopilación que hizo Gerald Gardner, padre de la Wicca, como libro personal pero abierto a su coven, para que pudieran copiar sus rituales y añadir todos aquellos que a título personal les pareciera bien. De hecho, para Gardner el Libro de Sombras era un manual que debía tener el Coven, y no un libro personal. Eso llegaría después, con la extensión de las prácticas wiccanas, la aparición de nuevos aquelarres y nuevas ideas. 

Doreen Valiente, suma sacerdotisa del Bricket Wood Coven de Gardner, así como redactora y poetisa que influyó en la liturgia Wicca gardneriana, comentó una vez que el nombre de Libro de Sombras fue elegido por Gardner a raíz de ver que denominaban así a una obra del palmista y adivino Bashir, en un artículo que trataba sobre una obra en sánscrito que hablaba de la adivinación a partir de la longitud de las sombras. Considerándolo un nombre apropiado para sus trabajos personales, adoptó éste y lo expuso abiertamente, convirtiéndose en el nombre estándar de muchos libros de brujería y hechizos, e incluso apareciendo en obras de ficción. No olvidemos que también el nombre de Wicca se le debe a él, al haberlo utilizado desde el inglés antiguo wicce. 

Sin embargo, el Libro de Sombras de Gerald Gardner no es un grimorio como los que se entienden generalmente en el neopaganismo, y muchas personas que deciden hacerse con él se llevan una gran decepción, al no encontrar hechizos ordenados por temática ni una exposición clara de recetas. Por el contrario, el Libro de las Sombras de Gardner puede denominarse un libro casi litúrgico, como se verá a continuación. El libro se compone de varios apartados, pero en conjunto puede decirse que es una definición general de las creencias y la liturgia de la Wicca gardneriana, la cual, por otra parte, bebería de múltiples tradiciones asiáticas conocidas por Gardner, así como de la OTO (Ordo Templis Orientis), incluyendo el propio Crowley, y de las enseñanzas la bruja que lo inició en la brujería pagana, Lady Dorothy Clutterback. 

El actual Libro de Sombras gardneriano es una recopilación y modificación de todos sus textos y de muchos otros, con el fin de obtener los mejores resultados según convenga a la finalidad de cada aquelarre o coven, así como existen infinitas versiones para el desarrollo personal e individual. 

Ritual de Apertura

El Libro de las Sombras se inicia con el Ritual de apertura, en el que se expone abiertamente por primera vez la dualidad del Dios y la Diosa, a los cuales se denomina como "astado" y a ella, como "joven y anciana a la vez". Se debe pintar el círculo mágico en el espacio que se utilizará como altar con tiza y "repasarlo" con el athame o la espada ritual. Después, dice que se dibujen dos círculos mayores entorno a este. A pesar de que Gardner daba instrucciones concretas sobre las medidas de cada círculo según el propósito, lo cierto es que las medidas actualmente se realizan según la necesidad o los participantes. También recomendaba usar la athame o varita y una cuerda como compás para dibujarlos. Asimismo, se mencionan los dos pilares que simbolizan el umbral (comunes sólo en algunos cultos Wicca), y los cuatro sabbats mayores y los cuatro sabbats menores, que se desarrollan más adelante en la obra. Aquí se presenta la primera "ley Wicca", que comparte mucho con la ley de Crowley, pero le añade moralidad:

<<Haz aquello que deseas, este es el reto.

Mas a nadie dañes

He aquí la ley única

Que los Dioses te enseñan.

El Credo Wicca en ocho piadosas palabras:

Si nadie resulta lastimado haz aquello que deseas.>>

La purificación

A continuación tiene lugar una purificación/bendición con agua y sal. Algunos han querido ver una limpieza ritual del altar o del espacio sagrado, incluso de los presentes. Otros creen que es una eliminación de malos espíritus. Lo importante aquí es que se da el nombre del Dios y la Diosa: El Dios es Cernunnos, el nombre dado al dios cornudo de la mitología celta. La Diosa es llamada Aradia, muy probablemente en relación con la Diosa del Vangelo delle Streghe (Evangelio de las brujas), obra recopilatoria del folclore italiano del Charle G. Leland, a raíz de su contacto con la bruja Maddalena. 

El agua y la sal se bendicen señalándolas o introduciendo en ellas el athame mientras se recitan las bendiciones del Dios y la Diosa. Luego se mezclan y se realizan aspersiones.Si bien en el Libro de Sombras de Gardner se presenta numerosas veces el uso de látigos o azotes como purificación (llegando incluso a decir que son necesarios cuarenta por sesión), son pocos los aquelarres que lo toman al pie de la letra. Es más, son muchos los que han cambiado los látigos por las escobas, un símbolo mucho más "brujeril", para purificar el espacio y a los presentes de una manera mucho más simbólica y sutil.

Acto seguido se encienden las velas, ahuyentando a los malos espíritus. Se entra en el círculo mágico (o se visualiza) y se rodea tres veces, al tiempo que se dibujan tres pentagramas protectores. 

Evocación de los elementos

Ahora tiene lugar la evocación del círculo mágico. Con evocación nos referimos al llamamiento a los dioses y a los espíritus elementales, asociados a los puntos cardinales. En el rito, se mira en dichas direcciones, en algunos casos realizando gestos especiales que varían según el autor. La oración que propone Gardner es la siguiente:

<< Yo te conjuro, oh círculo de poder, para que seas un lugar de encuentro para el amor el gozo y la verdad, un escudo contra todos los maleficios, una frontera entre el mundo de los hombres y los Poderes, una frontera y una protección que preservará y contendrá el poder que en ti yo acumularé. Así yo te bendigo y consagro, por los nombres de Cernunnos y Aradia.

Escuchad Señores de la Torre del Este, señores del Aire. Yo os convoco, despierto y llamo para que observéis mis ritos y guardéis el círculo. Escuchad Señores de la Torre del Sur, señores del Fuego. Yo os convoco, despierto y llamo para que observéis mis ritos y guardéis el círculo. Escuchad Señores de la Torre del Oeste, señores del Agua, señores de la muerte y la iniciación. Yo os convoco, despierto y llamo para que observéis mis ritos y guardéis el círculo. Escuchad Señores de la Torre del Norte, señores de la Tierra, guardianes del portal boreal.

Oh! poderoso Dios, oh! Diosa bondadosa, yo os convoco, despierto y llamo para que observéis mis ritos y guardéis el círculo. >>

El Dibujo de la Luna y los Cinco Besos.

Tras la preparación, tienen lugar el Dibujo de la Luna y los Cinco Besos. En él, la Suma Sacerdotisa realiza el gesto de la Diosa (brazos cerrados según algunos, brazos abiertos en V según otros), y el Sumo Sacerdote o ayudante de la sacerdotisa pinta sobre su cuerpo un pentagrama – según Gardner, con una varita con extremo de falo, aunque en la actualidad esto no es muy tenido en cuenta y se utilizan los dedos, plumas, pinceles o varitas ritualizadas.  A continuación besan sus pies, sus rodillas, su vientre, su pecho y sus labios, mientras ellos mismos o el resto de partícipes, arrodillados, recitan lo siguiente:

<<Benditos sean los pies que te han conducido por este sendero.

Benditas sean las rodillas que reposarán ante el sagrado altar.

Bendito sea el útero sin el cual no podríamos ser.

Benditos sean los senos formados de la belleza.

Benditos sean los labios que dirán los nombres de gozo>>

Este ritual es considerado una adoración a la divinidad que la Suma Sacerdotisa simboliza. Actualmente este rito es intercambiado o realizado paralelamente con el Sumo Sacerdote, cambiando algunas palabras clave (por ejemplo, Bendito sea el útero sin el cual no podríamos ser, no tiene sentido en el cuerpo de un hombre. En su lugar se habla de su falo o de su vigor. Benditos sean los senos formados de la belleza, se cambia por el pecho, formado por la fortaleza). 

La Carga de la Diosa.

Comienza con una invocación a la Diosa y una bendición dirigida en realidad a los adeptos y a la sacerdotisa de la Diosa. En las iniciaciones, bodas (uniones de manos) y en los cambios de grado, este es el momento en el que los participantes pueden entrar y salir del círculo. Continúa con una exaltación de la Dios con sus diversos nombres, y en sus facetas femenina y de naturaleza. Este texto es una mezcla de los trabajos de Gardner, de Crowley, y del posterior retoque de Doreen Valiente. 

<< Escuchad las palabras de la Gran Madre llamada Artemisa, Astarte, Melusina, Afrodita, Dana, Arianrhod, Isis, Brid, y muchos otros nombres. >>

<<Yo te invoco y te llamo, ¡oh! Nuestra poderosa Madre, fuente de todo aquello que es fértil. Por las semillas y las raíces, por el brote y el tallo, por la hoja, la flor y el fruto, por la vida y el amor, yo te invoco para que desciendas al cuerpo de tu sierva y sacerdotisa.>>

También la asocia a la luna, y vincula la luna llena al momento propicio para los aquelarres, en los que la desnudez ritual se convertirá en un símbolo de libertad. Estas palabras son prácticamente un calco de las palabras de Aradia, diosa de las brujas e hija de Diana y Lucifer, en el Evangelio de las Brujas italiano.

<< Cuando vosotros tengáis una necesidad, una vez por mes y preferiblemente en luna llena, reuníos en algún lugar secreto y adorad mí espíritu, a mí que soy la reina de las brujas y brujos. Allí se reunirán aquellos que deseen aprender toda la magia, aquellos que no han descubierto sus más profundos secretos. A éstos allí enseñaré lo que aún es desconocido. Vosotros seréis libres de esclavitud y como símbolo de vuestra real libertad celebrareis vuestros ritos en la desnudez (…) >>

La desnudez en la actualidad no es una obligación. En el S.XX, gran parte de las órdenes ocultistas, en especial Crowley y Gardner, insistían en la desnudez como parte importante de los ritos, fueran de purificación, sexuales, de invocación… la desnudez era una forma de mostrarse libre, no sólo espiritualmente, sino de las presiones sociales.

Asimismo, la Diosa expone sus bendiciones y el premio de la inmortalidad. Se indica claramente que el sacrificio animal no es necesario en la Wicca: << Yo no exijo sacrificio alguno puesto que soy madre de todos lo que es vivo y mi amor riega la tierra. >>

Tras el monólogo y presentación de la diosa, tienen lugar las palabras mágicas o cánticos. El texto que se utiliza son palabras mágicas utilizadas en Le miracle de Theóphile, una representación teatral religiosa del S. XIII, obra del trovador Rutebef. En ella, el hechicero Salatin (probablemente un nombre inspirado en Saladino), realiza una invocación al demonio utilizando estas mismas palabras.

<< Bagahi laca bachahé

Lamac cahi achabahé

Karrelyos

Lamac

Lamec bachalyos

Cabahagi sabalyos

Baryolas

Lagozatha cabyolas

Samahac et famyolas 

Harrahya! >> 

Algunos estudiosos han propuesto que el texto sea una mala transcripción de palabras vascas, otros, que se traten de palabras "sin sentido", como ocurría en los hechizos de la antigüedad o los medievales, pero la mayoría de autores wiccanos le quitan importancia. La mayoría de los practicantes consideran que son palabras mágicas usadas tradicionalmente en los aquelarres, y las tratan como tal. La Suma Sacerdotisa queda entonces "poseída" por la Diosa, y sus palabras son pronunciadas de manera oracular hacia el aquelarre, que puede convocarla con motivo de una festividad o Sabbat, o por algún motivo concreto que quiera planteársele. 

Invocación al Dios

Paralelamente se desarrolló un ritual de invocación a la divinidad masculina, aunque es raro el caso en el que tiene lugar la posesión por el Dios. Antes bien, la invocación se utiliza sobre todo para simbolizar la presencia del Dios cuando tiene lugar algún rito donde la representación de ambos sexos es relevante. 

<<Gran Dios Cernunnos, desciende a la tierra entre nosotrosResponde a mi llamada y muéstrate ante todos.Pastor de los cabríos por senderos montañososConduce tu rebaño del anochecer al día luminoso.Olvidados han sido los senderos del sueño y la nocheEl hombre los busca mas con ojos de murciélago.Abre la puerta sin llaves ni cerraduraEl onírico portal que a Ti conduce.Oh! Pastor de los cabríos yo te lo ruego respóndeme.Akhera goiti-akhera beiti! >>

Las últimas palabras (Akhera goiti-akhera beiti) parecen ser, nada más y nada menos, que euskera, lengua vasca, y que vendrían a significar: Macho cabrío arriba, macho cabrío abajo. Se cree que son palabras que harían referencia a los supuestos aquelarres infernales e invocando al demonio en su forma de cabrón negro. Pero no olvidemos que el macho cabrío es tradicionalmente también un símbolo de fertilidad.

Ritual de cierre

Como veremos en la segunda parte de este artículo, hay otros muchos rituales wiccanos que tienen lugar en una liturgia Wicca, en un aquelarre ocasional o en un Sabbat. Pero de momento nos parecía lo mejor cerrar el artículo indicando el modo correcto, según el Libro de sombras gardneriano y la visión estandarizada, de finalizar tanto un aquelarre como un ritual personal en el que se haya realizado un círculo mágico con la evocación de los elementos. Como no podía ser de otra forma, se despide amablemente al Dios y la Diosa y a los espíritus elementales.

<< Escuchad Señores de la Torre del Este, señores del Aire. Yo os agradezco el haber asistido a nuestros rituales y cuando vosotros volvéis a vuestros hermosos y dulces reinos, os saludo y despido. >>

E igualmente con los demás: <<Escuchad Señores de la Torre del Sur, señores del Fuego.…. Escuchad Señores de la Torre del Oeste, señores del Agua, señores de la muerte y la iniciación.… Escuchad Señores de la Torre del Norte, señores de la Tierra, guardianes del portal boreal... >> 

 Pietro Viktor Carracedo Ahumada - pietrocarracedo@gmail.com


Bibliografía:

-Guiley, R.E. The Encyclopedia of Witches, Witchcraft and Wicca. New York: Checkmark Books (2008).

-Howard, M. Modern Wicca: A History From Gerald Gardner to the Present. Llewellyn Worldwide, Minnesota, 2009.

-Siegler, E. Nuevos movimientos religiosos, Akal, 2005 Madrid.

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