Mudras de la riqueza: Lakshmi y Ganesha
En el artículo introductorio ya vimos en qué consistía un mudra, y cuáles eran sus funciones según el pensamiento esotérico oriental. Aunque están originalmente pensados como "yoga de manos", es decir, con un fin de mejora física y espiritual, rápidamente evolucionó hacia los ámbitos de la magia práctica, y por lo tanto, a la búsqueda de cuestiones más palpables. Entre ellas se encuentran, por supuesto, el dinero y el éxito. Pero si mantenemos la consciencia de que los mudras son sobre todo canalizaciones de energía, la intención será alterar dichas energías para atraer aquello que se desea.
Aquí vamos a centrarnos en los mudras más "directos" en lo que a la obtención de cuestiones monetarias se refiere, ya que en relación al éxito hay muchas posibilidades, pues el éxito puede ser económico-laboral, pero también familiar, amoroso, espiritual, de salud… y estaríamos entrando en otros ámbitos. Por eso hemos titulado al artículo "mudras de riqueza", para que se entienda mejor el objetivo concreto tanto del practicante como de la llamada de las divinidades a las que hacen referencia.
El mudra más famoso para cuestiones de dinero o éxito es el Kubera mudra, que ya vimos en el artículo de introducción, pero que repasaremos aquí. Este mudra se asocia a Kúbera, dios hindú de la riqueza, pero también a Lakhsmi, esposa de Visnú, relacionada con la prosperidad. Este gesto se hace con los dedos índice, corazón y pulgar unidos en punta, mientras que los otros dos dedos se encogen sobre la palma de la mano.
En la vinculación elemental tradicional, el pulgar es el fuego, el índice el aire y el corazón el éter. Esto supondría una especie de "escalera" hacia lo alto, desde el fuego, que siempre sube, al aire. En la asociación planetaria, Marte, el pulgar, que simboliza la potencia, se une a Júpiter, el poder en sí mismo, la energía, y a Saturno, la maduración, la superación.
El Kubera Mudra se utiliza para tener suerte en cualquier ámbito, pero su uso continuado y consciente se dice que atrae el dinero y la fortuna material. Para ello se recomienda recitar también mantras de superación o relacionados con Lakshmi.
A nivel de salud física, los tres dedos utilizados se relacionan con los chakras del plexo solar, el corazón y la garganta, algo positivo a nivel de respiración. En digitopuntura, la yema del dedo pulgar se relaciona con las fosas nasales, y el espacio entre este dedo y el índice, con los resfriados, la garganta y la sinusitis. Esto último se repite en la reflexología. Según los meridianos, el pulgar se encuentra asociado a los pulmones. En meditación debe visualizarse un loto rosa abriéndose, que es el símbolo de la diosa Lakhsmi, y hacer el ejercicio de "oler" el aroma de la flor, una clara referencia al ejercicio respiratorio.
En relación con Lakhsmi hay varios mudras más, todos con finalidades parecidas:
Concretamente hay dos mudras que reciben el nombre de la diosa, Lakshmi mudra.
Uno de ellos se realiza con una sola mano, con el puño cerrado excepto el índice, que solo dobla las primeras falanges, para presionar la punta del pulgar, que se queda recto. Siguiendo los conocimientos elementales tradicionales, el pulgar, fuego, se une al aire, índice: en otras palabras, ese fuego se aviva. En relación planetaria, Marte se une a Júpiter, potenciando la energía. El pulgar, como ya vimos, está también asociado a los pulmones, por lo que debe ser un mudra de respiración consciente. Este mudra se utiliza como el kubera mudra, y en especial para resolución de problemas y creatividad. Sería un mudra activo, que atrae lo positivo, y en este caso, la prosperidad y el cumplimiento de deseos.
En segundo lugar tendríamos el segundo Lakhsmi mudra, que se realiza uniendo los bordes de las manos y los meñiques, cerrando los demás dedos en puño, con los pulgares apoyados rectos. Las palmas deben estar mirado hacia uno mismo. Analizando las correspondencias de los dedos de la mano, los meñiques están relacionados con el agua y con el planeta Mercurio, es decir, con la adaptabilidad y la inteligencia. Este mudra es un "abre caminos", ya que los pulgares (fuego) limitan el camino de las energías que llegan y se enfocan en la dirección de las palmas. Los meñiques se asocian al chakra sacro, el cual a su vez se relaciona con las emociones, los sentimientos y la creatividad. La atracción de prosperidad de este mudra está destinada sobre todo a la eliminación de bloqueos, a la evolución favorable de las situaciones, a la canalización de las oportunidades y a la atracción de la suerte.
Veamos ahora el Padma mudra, también llamado Mudra del Loto. El Loto es también símbolo de la diosa, como vimos anteriormente. Este gesto sagrado se realiza con ambas manos, y al contrario que los anteriores, se trata de un mudra pasivo, pues con las manos se realiza un loto abierto, que, si bien evoca la apertura y crecimiento de la flor, es también un recipiente donde recibir los bienes esperados. Para este mudra se unen los meñiques como en el anterior, pero los demás dedos quedan estirados y abiertos, excepto los pulgares, que se tocan entre sí, "cerrando" el círculo que simboliza la corola de la flor.
Ganesha, el dios con cabeza de elefante, es otro dios de la abundancia. El Ganesha mudra se considera un removedor de obstáculos potente, basándose en que Ganesha era un soldado guardián de la diosa Parvati (otro avatar de Lakshmi), hasta que se topó con Shiva, el esposo, quien le cortó la cabeza pero, al comprender quién era y lo que defendía, la sustituyó con la cabeza divina del elefante.
En el Ganesha mudra la mano izquierda se coloca ante el pecho con la palma hacia fuera, mientras que la mano derecha se apoyará su palma contra la de la izquierda. Después, los dedos se cerrarán sobre sí mismos para enganchar ambas manos y hacer fuerza en direcciones opuestas. Este mudra simboliza la fuerza de Ganesha y la apertura del plexo solar y del chakra del corazón - ya que al tirar movemos instintivamente también los brazos y el pecho hacia afuera. Además, todos los dedos, como recipientes elementales, están creando una unión de contrarios equilibrada. A nivel físico, este mudra mejora la respiración y regula los latidos del corazón, eliminando la presión del pecho y la espalda.
Este equilibrio potencia también la llegada de todo lo bueno que falte y la salida de todo lo malo que esté obstaculizando dicha llegada. No solo se utiliza para equilibrar la economía, también se le da uso para fortalecer el ánimo, o incluso en los momentos en que se necesita un extra de valor o motivación. Para trabajar con este mudra se suele recomendar pensar en el color rojo y expresar mudras de agradecimiento al dios.
Por otra parte, este mudra, al ser tan potente, tiene algunas contraindicaciones, como la realización por las mujeres embarazadas, o en estados emocionales alterados. Ello se debe no sólo a los vínculos elementales o astrológicos, sino también a que esta postura puede conllevar otros daños musculares si se realiza de forma incorrecta o repetitiva, sobre todo en muñecas, cuello y costado.
Asociados a Ganesha hay otros dos mudras, uno de ellos destinado a la protección Abhaya Mudra y otro enfocado en la abundancia material y espiritual - a menudo centrado en al primera parte -, el Varada Mudra. Ambos gestos están relacionados con las poses simbólicas que muestran las imágenes y esculturas del dios.
Abhaya mudra es la palma abierta, o en su defecto uniendo pulgar y meñique, que debe realizarse obligatoriamente con la mano derecha, con los dedos juntos mirando hacia arriba. Es un gesto de seguridad que ofrecen muchas imágenes hinduistas y también budistas. Abhaya (sánscrito, अभयमुद्रा) significa "sin temor", es un gesto divino de saludo, aprecio, de invitación y aceptación. Para quien lo realiza equivale a ponerse en la situación de seguridad del dios, la tranquilidad y el conocimiento de su poder, en este caso, de la consecución de sus objetivos.
Por su parte, el Varada mudra es igual pero con los dedos apuntando hacia abajo, tocando la tierra. Otras veces se puede ver este mudra sin tocar el suelo, señalando hacia abajo con los dedos índice y meñique y el resto recogidos de forma relajada. También es llamado vara mudra (porque "vara" significa regalo). Es una bendición que señala la abundancia de bienes materiales, terrenales. En la práctica suele realizarse a continuación del Abhaya, ya que de este modo se desarrolla espiritualmente la abundancia previamente a la realización de lo material. El índice y el meñique son el viento y el agua, respectivamente, elementos clave en el movimiento y la fertilidad. El índice está regido por Júpiter, planeta relacionado con el poder, y el meñique además tiene asociado a Mercurio, planeta de movimiento rápido y asociado al comercio y el intercambio. Por otro lado, existe la idea religiosa de que los 5 dedos representan las 5 perfecciones espirituales, que producen el éxito: generosidad, moralidad, paciencia, esfuerzo y concentración. Varada mudra sería entonces como un recordatorio de lo que viene tras dicha práctica, y se realiza con el convencimiento de que la recompensa solicitada se merece.
Pietro V. Carracedo Ahumada - pietrocarracedo@gmail.com
Bibliografía:
-Calle, Ramiro A, Diccionario de orientalismo y budismo. Tikal ediciones, Barcelona, 1999
-Diamond, John W. The clinical practice of complementary, alternative and Western medicine. Crc Press, USA 2001.
-Hirschi, G. Mudras. Ediciones Urano-Vintage. Barcelona 2017.
-Indu Arora; Mudra: The Sacred Secret, Yogsadhna LLC, 2015
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